La política de derechos humanos en el gobierno electo de Mauricio Macri estará a cargo de Claudio Avruj, quien se desempañaba al frente de ese área en el gobierno porteño.
Avruj fue funcionario ejecutivo de la DAIA durante diez años, entre 1997 y 2007, hasta que se incorporó a la gestión PRO, bajo el ala del entonces secretario general, Marcos Peña.
En octubre del 2011, Avruj se convirtió en subsecretario de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural, desde donde impulsó talleres de campaña contra el bullyng y por la convivencia con la diversidad sexual, así como la creación de una dirección de asistencia a víctimas de delitos sexuales.
A Avruj le tocará suceder a Martín Fresneda, uno de fundadores de la agrupación Hijos en Córdoba que ocupó la titularidad de la secretaría de Derechos Humanos en 2012, tras el fallecimiento de Luis Eduardo Duhalde.
El lunes pasado, en la primera conferencia de prensa tras ser electo el domingo pasado, Macri afirmó que los juicios de lesa humanidad seguirán adelante, mientras que ayer el ministro de la Corte Suprema de Justicia Ricardo Lorenzetti se encargó a aclarar que esas causas son "políticas de Estado" que no cambiarán con el color de gobierno.
El 10 de noviembre pasado, el propio Avruj había publicado una nota de opinión en el diario Clarín diciendo: "Tenemos la necesidad y el desafío de resignificar desde la política de derechos humanos para la Argentina del siglo XXI conceptos y valores como dignidad, libertad, igualdad, fraternidad, diversidad, justicia, equidad, obligaciones, derechos, garantías, sustentabilidad, transparencia". "El ejercicio de Memoria, Verdad y Justicia que debemos continuar, sostener y profundizar nos tiene que permitir incorporar, ampliar y generar convergencia hacia un paradigma para nuestra sociedad democrática, que es el de la convivencia, el diálogo, la integración, el encuentro y el pluralismo, que son fundamentales para dignificar la vida de todos los ciudadanos", afirmó.
