Desde que Cambiemos llegó al gobierno, la plantilla de empleados dependientes del Estado creció un 1 por ciento en comparación a la gestión anterior. Una historia de “grasa militante” y cargos similares a trabalenguas. En este sentido, y a pesar de haber anunciado la intención de bajar la cantidad de empleados públicos, un informe del Ministerio de Trabajo asegura que hubo un incremento del 2,4 por ciento en comparación a junio de 2015.
Según el informe “Seguimiento del empleo público nacional, provincial y municipal”, elaborado por el Ministerio de Trabajo que conduce Jorge Triaca, a pesar de lo declarado por los funcionarios de Cambiemos, el empleo público sigue creciendo, pero con diferente color. Desde designaciones con nombres larguísimos hasta un mayor crecimiento en las provincias del mismo signo político, la cantidad de personal público ya alcanzó los mismos niveles que dejó el gobierno anterior. Incluso, la cifras demuestran que desde que asumió Macri, la plantilla de empleados públicos creció un 1 por ciento.
Luego de las cesantías de los primeros meses del año provocada por la política de revisión de contratos que ejecutó el Ministerio de Modernización y que dejó en la calle a 10.622 trabajadores, el empleo público alcanzó, en junio, un total de 3.458.448 puestos de trabajo; es decir que tuvo un incremento del 2,4 por ciento en comparación con el mismo mes de 2015, lo que equivale a 80.000 nuevos empleos. Una cifra un poco menor en relación a los 90.000 puestos laborales que se perdieron en el sector privado, según cifras del mismo ministerio.
La suba dentro de este sector corresponde en un 66 por ciento al ámbito provincial (2.277.662), en un 21 por ciento al nacional (739.097) y en un 13 por ciento al municipal (441.689). Asimismo, la cantidad de empleados provinciales se incrementó en 48.922 puestos de trabajo, siendo más de 21mil que se incorporaron la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (3.688), la provincia de Buenos Aires (12.363), Salta (2543) y Jujuy (2666). Es decir que las cuatro provincias gobernadas o cercanas a Cambiemos “suman casi el 50 por ciento de la totalidad de los nuevos empleados públicos provinciales”.
Y si bien se produjo una fuerte desaceleración en el ritmo de expansión de personal -en el mismo período del año anterior había alcanzado un 3 por ciento-, la tendencia sigue siendo creciente en los tres estamentos.
Frente a los rumores de nuevas cesantías de empleados “heredados” de la gestión Kirchnerista, el Gobierno de Mauricio Macri negó “que hacia fin de año pueda haber una nueva "oleada" de despidos”, aunque desde la Asociación de trabajadores del Estado (ATE) mantienen la guardia en alto. "Se van a vencer 90.000 contratos. Ibarra dijo que no habrá despidos, pero dijeron cosas que después no cumplieron", dijo Hugo "Cachorro" Godoy, Secretario General del gremio.
Nueva “grasa militante”
Durante la conferencia de prensa que brindó Alfonso Prat Gay, Ministro de Hacienda de la Nación, sobre las negociaciones con los fondos buitre en enero de este año, deslizó la polémica frase "no vamos a dejar la grasa militante, vamos a contratar gente idónea y eliminar ñoquis".
Sin embargo, en lo que va del año el gobierno de Cambiemos realizó una serie de nombramientos de nuevos cargos burocráticos con sueldos brutos que van de los 33 mil a los 50 mil pesos, sin contar los adicionales, y con nombres que resultan casi un trabalenguas.
Un ejemplo es la joven María del Pilar Mayora designada como “Coordinadora de la Coordinación de Desarrollo y Plataformas Tecnológicas de la Dirección de Datos Públicos de la Dirección Nacional de Datos e Información Pública de la Subsecretaría de Innovación Pública y Gobierno Abierto de la Secretaría de Gestión e Innovación Pública del Ministerio de Modernización”, anunciada en el Boletín Oficial del 16 de noviembre.
Otros nombramientos
Pablo Vago, fue nombrado en abril, como “Director de la Dirección de Coordinación de la Red de Recursos Humanos dependiente de la Dirección Nacional de Coordinación Interministerial de Recursos Humanos de la Subsecretaría de Relaciones Laborales y Fortalecimiento del Servicio Civil”. En la cartera liderada por Carolina Stanley, en tanto, se nombró a la licenciada María Guadalupe Eiranova por 180 días como “Coordinadora de Productos y Servicios Relacionados con la Identidad Cultural de la Dirección Nacional de Promoción de la Comercialización de la Economía Social de la Secretaría de Organización y Comunicación del Ministerio de Desarrollo Social”.
La lista sigue y se replica por cada uno de los ministerios, aunque no se limita a la gestión del PRO en la Nación. Al recorrer las páginas del Boletín Oficial o de los boletines de los diferentes distritos se encuentran decenas y decenas de designaciones como éstas. Desde ATE denuncian que “mientras en el primer semestre echaron a cien empleados y ex funcionarios de bajo rango, en el segundo semestre terminaron incorporando a 150 y con designaciones como la de Mayora.
